Relato sobre ‘Trasmoz y la estatua de Bécquer”. Autor: Carlos Casado
05/05/2014
No había ningún tipo de huella que permitiera adivinar el modo en el que había desaparecido la estatua. Anduve carretera abajo para buscar algún indicio o signo que diera pistas sobre su paradero. Una muchacha joven, no tendría los dieciocho años, me chistó desde una enramada del bosque. Me aproximé y me dijo que no me acercara más. Me explicó que era descendiente de Dorotea, una de las ajusticiadas por el Santo Oficio, acusada por brujería. Me dijo que ante la carencia de seres humanos con los que hacer hechicería, montó la estatua en su escoba y la llevó volando.
Autor: Carlos Casado