Ibercaja y Caja 3 son una misma empresa de forma oficial desde este miércoles
Se produce la integración jurídica completa en un proceso que ha durado 2 años y siete meses, desde que por sorpresa se anunció la unión de ambas entidades. Desde entonces se han sucedido muchos movimientos, con otros actores implicados, intensas negociaciones laborales e incluso ayudas europeas para el banco propietario de la CAI que han culminado en el llamado gran banco aragonés.
El 29 de febrero de 2012 se firmó el primer protocolo de integración entre ambas entidades, acuerdo que quedó postpuesto ese mismo mes de mayo con la adhesión de Liberbank, un protocolo que luego fue roto en octubre para retomar el proyecto de banco aragonés ese mismo año.
Desde ese mismo mes se sucedieron las negociaciones que han llevado a varios expedientes de regulación en ambas entidades, hasta que llegó la firma del acuerdo de integración laboral a finales de julio. Un proceso largo que, para los trabajadores, acaba con ilusión por lo que viene pero también con mucha incertidumbre.
Proceso de integración total que se produce hoy de forma jurídica. El día 17 se culminará la informática, para el lunes 20 se pueda comenzar a operar indistintamente en cualquier oficina.
La entidad que nace hoy es el octavo grupo bancario de toda España con 63.500 millones de euros en activos, 1.400 oficinas y más de 6.300 empleados, cifra que ha quedado mermada en alrededor de 1.200 en este periodo.
Esta unión también supone la reestructuración de las redes de ambas entidades. Durante el mes de octubre, los servicios centrales de la CAI pasarán a la sede de Ibercaja, aunque no está previsto que desaparezca la marca comercial Caja Inmaculada en un corto espacio de tiempo. De hecho hasta junio de 2015, la empresa continúa con algunos de sus patrocinios deportivos, como el más significativo, el del Basket Zaragoza 2002.